Páginas

sábado, 25 de septiembre de 2010

En blanco y negro


Imágenes. Imágenes que van pasando, fotografías lejanas. Arrastrando una colección de recuerdos. Momentos. Miradas. Solo imágenes.

Te veo en imágenes. Te veo en cámara lenta. Sonriendo para mi, escondiendo tu llanto de mi.

Estoy lejos y las imágenes ya no son tan nítidas. El tiempo pasa y me va alejando. Imágenes ahora en blanco y negro. Te veo en videos. Suspirás divertido, suspirás resignado. Tu voz y tu risa ausentes. Te veo en cámara lenta, sin sonido. Pero las imágenes ya son cenizas enredándose al viento.

La bruma impone presencia y se interpone. Ya no te veo, ya no hay imágenes. Te desvaneces y mi pasado se desintegra. El olvido te cubre y las imágenes se pierden. Ya no quedan ni recuerdos.

Carta monserrtense

Cuando te pregunten quién era Domínguez: Podés decir que era el portero o, vos monserratense, podés decir que el monse no es lo mismo sin él. Contale de la cantidad de fotocopias que te sacó y de las que te salvó. Contale como miraba para otro lado para que cruzaras a Soluciones por esa copia que te faltó. Y de los mates con educorante ¿Te acordás? No te olvides de decir que era el único que sabía tocar la campana como se debe. El Monserrat tiene historia y leyendas. Podrías decirles que él ahora es una leyenda o que ya es parte de nuestra historia.
Cuando te pregunten quién era, decile que era un genio, un ídolo y que está entre los grandes.
Cuando te pregunten, a vos monserratense, quién era Pedro Domínguez. Decile, simplemente, la verdad.